Aplicaciones del oxígeno medicinal

Oxígeno medicinal es un gas inerte, incoloro y no tóxico. Es el compuesto químico más abundante en la atmósfera y un componente esencial para la vida. El oxígeno medicinal se utiliza en hospitales y clínicas para tratar los casos de asfixia, insuficiencia respiratoria aguda (insuficiencia respiratoria), hipoxia (baja saturación de oxígeno) y anemia.

El oxígeno es un gas que se encuentra naturalmente en todo el mundo. El oxígeno puro se usa en hospitales como parte del tratamiento de pacientes con deficiencia respiratoria aguda o insuficiencia respiratoria pulmonar grave. El oxígeno medicinal puede ayudar a mejorar la función pulmonar de los pacientes y mantener su saturación de oxígeno lo más alta posible.

El uso del oxigeno medicinal se utiliza para tratar varias enfermedades y síntomas, entre ellos:
- Dolor de cabeza, migraña y tensión.
- Fatiga crónica
- Depresión y ansiedad
- Enfermedades pulmonares como asma y bronquitis crónicas
- Dolores musculares (lumbalgia, artritis, etc.)
- - Dolores reumáticas o inflamatorios (artritis reumatoide, espondilitis anquilosante, etc.)
- Fibromialgia y artritis reumatoidea
- Problemas digestivos (reflujo gastroesofágico, úlceras pépticas, estreñimiento crónico)
- Trastornos circulatorios (hipotensión arterial)

Todo el mundo necesita oxígeno. En los momentos de las emergencias, cuando se tiene que salvar la vida de alguien, es muy importante contar con una solución de oxígeno en la ambulancia. El oxígeno medicinal se usa para tratar la hipoxia (déficit de oxígeno en el organismo) causado por diversas condiciones como asfixia, intoxicación, quemaduras o infecciones.